Cómo hicimos el voluntariado más tierno de nuestras vidas. Cuidando osos panda en China. Los alimentamos, limpiamos su espacio, y hasta los abrazamos.
Algo tienen estas criaturas que el mundo las encuentra irresistibles y tiernas, su apachurrable gordura, o tal vez las manchitas negras perfectamente posicionadas. Pero no todo es color de rosa en el mundo de los osos pandas, pues son una especie muy delicada. Su hábitat se ha destruido por actividad del hombre, además son animales con ciclos reproductivos muy lentos y difíciles.
En setiembre de 2016, por el arduo trabajo de centros de conservación en China, los pandas dejaron su condición de estar “en peligro” para pasar a vulnerables.
En la ciudad de Chengdu, está la Reserva Natural Nacional Wolong, que permite a los viajeros entrar en contacto con los osos panda a través de un programa de voluntariado llamado “Panda Keeper”. La experiencia dura todo el día, desde las 09:00 hasta las 16:00, siete horas con los panditas!!!.
El día empieza con una charla de orientación, y luego a trabajar. Recoger bambúes, cortarlos, pelarlos y tenerlos listos para alimentar a los osos.
Después a limpiar los excrementos de los panditas (sí, también hay trabajo sucio). Pero claro, al salir de seres tan adorables no resulta asqueroso, de hecho, cómo sólo se alimentan de bambú y otras verduras, su olor es como a sopa de verduras, nada desagradable.
La parte en la que más se entra en contacto con los osos Panda es a la hora de alimentarlos. Los humanos entramos a unas jaulas (ya que ellos están siempre en espacios abiertos) y les damos de comer en la boca a través de unas rejas (por nuestra seguridad y la de ellos, ya que son muy juguetones y pesados, y en ocasiones pueden ser agresivos).
Por un pago adicional de 250 dólares (aproximadamente), que va enteramente a apoyar el trabajo en la reserva, pudimos estar unos minutos en contacto directo con ellos, abrazarlos, sentirlos y verlos muy muy de cerca.
CÓMO FUIMOS
La reserva la hicimos a través de la agencia de viaje especializada China Highlights, que de hecho se encargó por completo de los 23 días que duró el viaje.