Desde octubre del 2014, la aerolínea LATAM inauguró vuelos Lima-Talara, facilitando la entrada hacia las famosas playas de Piura, como Máncora y Órganos por su cercanía. Hasta ese entonces las únicas vías eran por el aeropuerto de Piura (3 horas y media en auto hasta Máncora) o Tumbes (1 hora y media).
Decidimos probar esta nueva ruta. LATAM maneja dos horarios de vuelo, uno que llega a Talara 14:40 y otro a las 17:15. Fuimos en el segundo. Llegamos al aeropuerto y como en cualquier ciudad turística, la rampa de salida llena de taxistas ofreciendo sus servicios. “A Máncora, a Pocitas, a Órganos”. Y se llenaron de gente que iba directo a esas playas.
¿Y si nos quedamos un par de días y conocemos Talara?. En vez de hacer una ruta larga y agotadora (1 hora y media de avión seguida de 1 y media de auto), cortamos el recorrido. A 10 min del aeropuerto está el hotel Casa Andina. Llegamos a descansar en el hotel y a recargar energías.
ITINERARIO DE UN DÍA EN TALARA
9:00
Tomamos el desayuno buffet de Casa Andina, muy completo y variado: huevos, embutidos, quesos, fruta, panes, jugos y café. El restaurante está adornado con fotos lindas del puerto de Talara, preparando el ambiente para arrancar el día.
10:00
Salimos camino a la playa Lobitos. Para llegar se puede tomar una van-colectivo desde el paradero “Lobitos” (S/.4 aprox).
En el camino fue imposible no toparnos con la vista de la imponente Refinería de Talara. Altísimas estructuras de metal y a través de ellas espiamos un poco del mar norteño. Seguido el puerto inundado de barcos pesqueros blancos. azules y rojos, pintoresco para ver camino a la playa.
10:20
Llegamos a la playa Lobitos. Nos recibió una área inmensa de arena, unas cuatro o cinco familias esparcidas entre la orilla y una decena de surfers ya en el agua. Si bien es buena para correr olas, éstas no se forman tan cerca de la orilla, entonces también se adapta a los bañistas.
A la izquierda de la playa encontramos una zona de rocas gigantes, las trepamos, y atrás de ellas encontramos unos espacios pequeños de arena. Nos refugiamos ahí como si estuviéramos en nuestra pequeña isla desierta.
16:00
Volvimos a Talara ciudad y dimos un paseo rápido por la Av. Bolognesi.
17:00
De regreso al hotel Casa Andina, disfrutamos una tarde tranquila en la terraza esperando el sunset. Tiene un espacio con sillones cómodos y al aire libre, donde se puede ver el atardecer norteño desde las alturas. Para los deportistas, al lado tiene un gimnasio bien equipado.
20:00
Cenamos en el restaurante Sama (dentro del hotel): recomendamos altamente el majado de yuca con pulpo parrillero. Una delicia, mejor acompañado de una cerveza nacional.
Talara es un gran destino para disfrutar tanto camino a otras playas, como en una escapada de fin de semana. Una opción diferente para disfrutar del calor del norte peruano que nunca decepciona.